Hoy vengo sin receta, porque la entrada es sobre mi gran asignatura pendiente: los macarons.
Lo he intentado mil veces, con una receta, con otra, siguiendo al pie de la letra todo... y nada, no consigo el bendito pie de los macarons!
Ayer fue el último intento. He de confesar que los tenía bastante abandonados debido a la frustación que me ocasionan, pero desde que descubrí a Alma Obregón, de Objetivo Cupcake Perfecto, nada ha sido igual en mi cocina. Y como allí leí otra receta de macarons, pues me puse manos a la obra. Pero nada... no hay pie.
Seguiré intentandolo, aunque dejaré pasar unos días que dedicaré a la investigación, a ver si descubro cual es el fallo, porque ya hasta sueño que estoy horneando macarons y me salen perfectos!
Espero conseguirlo algún día...
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